domingo, 25 de octubre de 2009

41. Mec-Mec !!

Entrada 41 de este blog. Nunca pensé ni de lejos que esto fuera a tener tantas entradas. O quizás sí lo esperaba; pero no de esta calidad.

Y cuando hablo de calidad, no me refiero a la calidad literaria de entradas, si no a calidad de cómo he conseguido por medio de palabras propias, canciones, poemas, cuentos, estrofas, citas de personajes célebres o de personas anónimas encontradas por el mundo virtual (sdj: gran ejemplo) expresar lo que he sentido o que querido expresar en cada momento de mi vida. O al menos de cada una de las etapas de este intervalo aún abierto.

Valoro cada una de todas las (40) entradas. Maraña de pensamientos expulsados de manera brusca con éxito.

Entradas que han iluminado dos grandes estrellas en procesos de super nova o quizás ya ocurrió el colapso, y aún sigue llegando su luz de hace meses a mis ya otoñales experiencias. Porque aún sigo sintiendo un pequeño remanente estelar con tu firma, aunque yo me niege a mirarlo, quizás por temor.

¿Temor a qué? Temor permanente a no acabar de dar los pasos que uno se propone. Temor a podrirme en zonas pantanosas, de las que sólo es capaz de escapar con vida el último superviviente. Y yo de último tengo poco, la verdad. Y de superviviente, menos.

Hubo tiempos que me replanteé cerrar esto, también por temor. Y es que para qué negarlo, mucho de este blog gira en torno a temores y a evadirlos...pero eso es un tema para otro día. Como decía me replanteé cerrar esto porque me parecían escasas las aportaciones que yo podía aportaros, así como escasas me parecían siempre las que ustedes podías regalarme. Hubo una lucha interna sobre cual era el verdadero motivo de mantener un blog, para escribir y que la gente leyera, o utilizarlo simplemente como un diario electrónico semi-privado (o semi-público) y sin importarme mucho lo que comenten y no comenten, lo que piensen y dejen de pensar. Creo que al final me decidí por lo segundo. Y utilizo la palabra "creo" pero no fue algo que decidí, simplemente me dejé llevar y actualizar por impulsos, sin detenerme a pasarlo todo por un filtro para os faltaran cifras suficientes como para no seguir mi explicación analítica. Porque antes encontraba la gracia ahí, en que si faltaran cifras...las encontrarais. Esa falta de filtro obligado ha hecho que mis últimas entradas no tengan ningún tipo de espacio de tiempo establecido entre ellas, y muchas palabras muy explícitas pero igual de desorientativas.

Y es que las últimas entradas son suyas. Y de nadie más. Y ahí quedarán esperando a ser leídas.

Hoy. Hoy me siento con ganas de cantarme un jazz en una azotea. A estas horas de la noche me siento con ganas de irme a bailar a los red hot mientras el correcaminos y el coyote siguen peleandose, en un plasma y sin sonido.



¡¡ Mec-Mec !!

2 comentarios:

Soñadora Empedernida dijo...

Desprestigias a los ojos soñadores que te siguen.

Soñadora Empedernida dijo...

(Al final no hubo e-mail, por cierto...)